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Los objetivos de la iniciativa son: a) Expandir las capacidades, conocimientos y habilidades de las Organizaciones Sociales como articuladoras y transmisoras institucionales de las problemáticas comunitarias; y b) profundizar la densidad de las relaciones con la comunidad y mejorar cuantitativa y cualitativamente sus potencialidades de incidencia en las decisiones públicas, utilizando el deporte, la cultura y el derecho como herramientas de confianza.
Para alcanzar estos objetivos, la práctica cuenta con tres componentes que se articulan entre sí, y a la vez guardan cierto grado de autonomía. Por una parte, está el componente deportivo, que consiste en la creación de ligas de fútbol callejero en la región del noroeste del conurbano y también en algunas provincias del interior del país. La metodología del fútbol callejero es una nueva forma de jugar al fútbol en donde prima el valor educativo del deporte y la adquisición de habilidades por parte de los jóvenes para resolver sus conflictos pacíficamente, liderar procesos, educar a sus pares.
La idea es generar espacios de encuentro entre los jóvenes y sus familias, invitándolos a participar y adquirir habilidades para la resolución de sus conflictos, desarrollo de liderazgo juvenil, capacidades para la promoción de acciones deportivas en comunidades vulnerables y desde luego, dar la discusión sobre el rol de los jóvenes, sobre sus derechos y sobre cómo y por qué participar. Luego está el componente cultural o artístico, que consiste en la realización de eventos culturales en espacios públicos, muchas veces articulados con actividades deportivas y que tienen por finalidad recuperar la identidad cultural de los habitantes de la región, generar espacios de encuentro entre vecinos y aprovechar estas instancias para acercar información a la gente.
Así, se realizan actividades como los Aguante la Cultura, Barrio Abierto, FM la Posta, distribución de publicaciones como "La Posta Regional", boletines y otros productos comunicacionales. Luego está el componente de formación en derechos, en donde se capacita a dirigentes y miembros de organizaciones sociales, docentes, comunidad educativa en general, jóvenes, etc. sobre derechos sociales, políticos y económicos, acceso a servicios básicos, formas de intervención pública, etc- Se les brindan herramientas jurídicas para poder hacer respetar sus derechos individuales y colectivos. Asimismo, se realizan estudios de caso y se facilitan las intervenciones colectivas sobre temas tales como salud, educación, derecho de los jóvenes, etc. El trabajo de estas organizaciones permitió que poco a poco surgiera una red de organizaciones en toda la región, que se denominó "Movimiento por la Carta Popular".
La llamada "Carta Popular" que impulsa esta red es una iniciativa que inicialmente recogió la visión de 1500 familias acerca de las necesidades barriales y de los modos de mejorar la participación y la democracia, para luego impulsar y coordinar la elaboración participativa de una serie de propuestas político-sociales a nivel vecinal y barrial. El objetivo es crear una Carta Popular que se constituya en un elemento contundente de debate y soluciones concretas en cuatro municipios en los que la pobreza y el desempleo cobran más y nuevas víctimas cada día, sobretodo entre los niños y los jóvenes. En este sentido, esta actividad constituye un claro paso hacia la construcción de una Democracia Participativa en la región, que incorpore el protagonismo comunitario, el presupuesto participativo, la justa participación de los sectores populares en la generación y distribución del trabajo y la riqueza, el desarrollo local y la economía social.
Asimismo, se realizan actividades coordinadas entre las organizaciones miembro de la RED regional y participando en esta iniciativa. Dichas actividades son: los Aguante la Cultura (festivales culturales masivos y populares), los torneos de Fútbol callejero, la Caravana Cultural de los Barrios (un desfile de carrozas que tematizan problemas de la región y que recorren todos los municipios del noroeste), un Congreso de Vecinos (en noviembre de 2005 con la participación de 30 organizaciones de la zona, pastorales, etc.); la realización de una consulta popular a más de 1500 familias, entre otras actividades.
Impacto que se logró o espera lograr en la calidad de vida de las personas excluidas:
A través de esta iniciativa se ha logrado hasta el momento: - el aumento de la capacidad de las organizaciones sociales y la confianza creada entre ellas para trabajar juntas y promover acciones coordinadas, como el caso de la Carta Popular. Esto se ha logrado gracias a acciones coordinadas de capacitación, creación de equipos de trabajo, diálogo y trabajo consensuado, entre otras acciones. - La promoción de liderazgo en los jóvenes y la creación de espacios permanentes de encuentro y formación. Esto se ha logrado gracias a la creación de las Ligas de Fútbol Callejero, que actualmente cuentan con la participación de 40 organizaciones en la zona y más de 800 jóvenes participando. -La ampliación de los conocimientos sobre herramientas jurídicas y legales para actores clave en el desarrollo de la comunidad. Logrado gracias a las acciones de capacitación cívico-legal y otras actividades colectivas. -La creación de una red regional de organizaciones sociales, que es resultado de las acciones precedentes. -La presencia y difusión pública de las actividades deportivas y culturales que permite difundir la experiencia a gran escala. -La apertura al diálogo sobre la democracia que queremos en nuestras comunidades, resultado de las consultas populares, el Congreso de Vecinos y organizaciones sociales, la Caravana Cultural de los Barrios, entre otras acciones. -La facilitación de espacios de protagonismo social para personas individuales y colectivos que de otra forma permanecen excluidos.
Aspectos innovadores o replicables de la experiencia:
Uno de los principales aspectos que innova en esta práctica es la utilización del deporte y el arte como herramientas para la transformación social. Ambos elementos, combinados con acciones de capacitación y promoción de derechos permite que individuos y organizaciones aumenten su capacidad de incidencia pública y sean conscientes de la importancia de la participación ciudadana como elemento central en la transformación social. La adquisición de conocimientos, capacidades y habilidades para enfrentar los problemas sociales de la comunidad, diagnosticarlos, generar estrategias de acción y finalmente, movilizar la participación ciudadana va generando gradualmente un fortalecimiento de las organizaciones y al mismo tiempo de la red de instituciones.
El fortalecimiento de las instituciones facilita y le da permanencia a la interacción con otras organizaciones, al tiempo que sistematiza un ejercicio participativo que tiene como principal soporte la mayor capacidad de acceso a la información y el conocimiento de derechos que se adquirieron. Estos factores actúan como elementos de sostenibilidad del proyecto, el cual a futuro no requerirá de la intervención de las organizaciones del proyecto sino que se convertirá en un engranaje comunitario con autonomía propia. De esta forma, aún con todos los actores actuando en forma auto-interesada, la red y sus recursos seguirán funcionando, por lo tanto estas características particulares facilitaron las instancias de cooperación con otras organizaciones nacionales e internacionales y empresas.
Principales obstáculos o desafíos que presenta la práctica:
Se puede mencionar como debilidad o dificultad en la experiencia la cultura individualista. En las metodologías participativas como la que se implementa a través de este proyecto nos encontramos con dificultades que responden a cierta cultura individualista y de actitudes que responden a cierta concepción de la autoridad de manera central, jerárquica y verticalista, elementos que configuran prácticas autoritarias. En este sentido, de las limitaciones que podemos encontrar como dificultades para la articulación entre todos los miembros de la RED, problemas comunicacionales y organizacionales, etc. el más importante sigue siendo cultural, principalmente materializada a través de condicionamientos de tipo clientelar, que dificultan las posibilidades de intervención y retrasan el cambio de actitudes y conductas cívicas y ciudadanas. Sin embargo, confirmamos que la estrategia utilizada es altamente efectiva para generar el escenario propicio para la activación de las capacidades creativas y protagónicas en comunidades, equipos y organizaciones.
¿En el caso de resultar premiada la práctica postulada, en qué invertirá el premio?
En apoyar el trabajo de las diversas comisiones de trabajo de la red de organizaciones. Estas comisiones son: comunicación, comisión territorial y política, comisión metodológica (gestión del conocimiento). En general, se requieren recursos para acciones de comunicación conjunta (publicaciones de revistas, boletines, radio, etc.); para la elaboración de materiales de capacitación, traslados, etc. Esta inversión contribuiría a dar mayor visibilidad a la iniciativa y sostenibilidad al trabajo conjunto.