Programa ConCiencia por la Comunidad

  • Capacitación y transferencia de conocimientos en procesos de consultoría a ONGs
  • Argentina - Buenos Aires - Mar del Plata y área de influencia
    Contacto: Juan Martín Molinari
    Teléfono: 0223 467 2265 (particular) 0223 156 889203 (celular).
    E-mail: molinari@copefaro.com.ar.

    Actores involucrados en la práctica:
    · Equipo del Programa (Director: Juan Martín Molinari; Docentes Consultores: Gabriela Luján Molina, Patricia Ábalo y Juan Andrés del Río);
    · Universidad Atlántida Argentina (Sedes Mar del Plata, Dolores y Mar de Ajó );
    · Red de ONGs de las ciudades de Mar del Plata, Mar de Ajó, Rauch, Villa Gesell, Dolores, Partido de la Costa, Madariaga y Ayacucho;
    · Municipalidades de Mar del Plata, Mar de Ajó, Rauch, Villa Gesell, Dolores, Partido de la Costa, Madariaga y Ayacucho;
    · Empresas donantes de la ciudad de Mar del Plata y área de influencia.
    Explicación de cómo y por qué nace la práctica:
    Esta experiencia nace a partir de ideas, valores, y percepciones personales. En primer lugar, desde mis tiempos de estudiante me preocupa la cuestión de las relaciones de la Universidad con la comunidad de la que forma parte.

    Creo que, como institución, no siempre la Universidad se abre lo necesario a los problemas de las comunidades, y que es preciso fortalecer los procesos por los que la academia registra los problemas de la gente y pone en marcha mecanismos eficientes para abordarlos –como la transferencia de conocimientos y tecnologías. Tampoco el graduado tipo es un referente en este sentido, ya que es frecuente que luego de obtener su título se consagre a la construcción de su futuro profesional –sin pensar, la mayor parte de las veces, en devolver a la comunidad el aporte que le permitió titularse. La idea central aquí es que la academia –y todos los que en ella se desenvuelven- tienen una responsabilidad respecto de la comunidad, por el hecho de poseer conocimiento en abundancia –un recurso necesario para quienes se encuentran fuera de ella. Estoy persuadido de que, así como hay una responsabilidad social empresaria, hay una responsabilidad social académica. Y creo que la Universidad debe poner el énfasis de la transferencia de saberes sobre un actor social particular: las organizaciones de la sociedad civil.

    En segundo lugar, entiendo que vivimos hoy en una sociedad conformada por comunidades-islas donde la fragmentación, el desinterés por el destino del otro y la falta de compromiso con la cosa pública son la norma. El consumo es el parámetro que determina el “estar dentro” de esta comunidad, y la categoría de ciudadano ha salido de escena para dejar lugar a la de consumidor –que es claramente excluyente. En este escenario, resulta urgente tender puentes entre las diferentes islas, compatibilizar los múltiples intereses y actuar guiados por valores. La segunda idea central de esta propuesta es que la exclusión puede superarse a partir de la recomposición del tejido social, conectando a los diferentes actores que tienen distintos recursos para aportar. ¿Cómo? A través de un Programa de Extensión entendido no como actividades “desde” la Universidad “hacia” otros actores sociales, sino como un espacio de articulación, diálogo y acciones entre distintos intereses y perspectivas: del Estado municipal, de la Academia, de las Organizaciones Sociales y de la Empresa donante.

    En tercer lugar, estoy convencido de que el conocimiento genera cambios profundos y auténticos en las personas y las comunidades. La filosofía de este Programa es de inspiración moderna: solamente podemos cambiar a partir de saber. Las personas y las comunidades pueden cambiar en la medida en que empiezan a conocerse a sí mismos y a generar acciones a partir de este conocimiento. Saber es poder. Dice Alvin Toffler que el conocimiento es una fuente de poder mucho más eficiente que el poder del dinero y el de las armas.

    En otros términos: transferir conocimiento a las organizaciones de base significa construir –entre todos los actores involucrados- un espacio de poder con responsabilidad, que permita a la comunidad modificar sus condiciones de existencia. El discurso del empowerment, que nace con los desarrollos teóricos psicocomunitarios de fines del ´70, apunta en esta dirección. La denominación del Programa –ConCiencia por la Comunidad- pretende justamente expresar la voluntad de acercar herramientas de las ciencias sociales a las organizaciones de base, con el propósito de que éstas tomen conciencia de sus fortalezas y sus vulnerabilidades y optimicen su trabajo cotidiano. La tercera idea central aquí es la de un Programa que genere, a través de la transferencia de saberes, un contexto de cambio y optimización de las acciones de las organizaciones de la comunidad.

    Es a partir, entonces, de estas ideas y experiencias –la de responsabilidad social de la Academia, la de recomponer el tejido social por medio de la articulación de vínculos, objetivos e intereses comunes, y la del conocimiento como factor de cambio- que nace el Programa ConCiencia por la Comunidad, en que el esfuerzo de todos los actores se orienta a compartir con las organizaciones de la Sociedad Civil instrumentos analítico-conceptuales y de acción oriundos de las ciencias sociales.

    Como se dijo anteriormente, el marco institucional académico en que las acciones del Programa se desarrollan es la Extensión universitaria. El instrumento que legitima el vínculo de trabajo conjunto entre la comunidad y la Universidad es el Convenio de Extensión. La Universidad Atlántida Argentina ha firmado convenios de este tipo con Municipios de su área de influencia (Dolores, Ayacucho, Villa Gesell, Partido de la Costa y Rauch). De hecho, la primera actividad del Programa surgió como un curso de Extensión denominado Capacitación en Trabajo en Comunidad, dictado en junio y julio del presente año en el Municipio de Rauch.

    Esta primera Capacitación en Trabajo en Comunidad tuvo como principal objetivo introducir a los miembros y directivos de las ONGs locales –y a todos los interesados- a los saberes y prácticas transversales a las diversas áreas temáticas del trabajo comunitario (liderazgo efectivo, comunicación institucional, planificación estratégica, diagnóstico comunitario, etcétera). Asistieron aproximadamente 80 participantes, provenientes de ONGs locales y del sector público en las áreas de salud, justicia, seguridad, ambiente y educación. El éxito de esta primera actividad y la evaluación positiva que tuvo por parte de los que participaron en ella me motivó a extender y profundizar las actividades del Programa, discriminando en él tres líneas de trabajo, que detallaré en el próximo apartado.

    El programa ConCiencia por la Comunidad posee tres líneas de trabajo o subprogramas, de las cuales sólo la primera posee un grado de avance e implementación. El primer subprograma, Capacitación a ONGs, tiene como propósito capacitar al personal voluntario y rentado de las Organizaciones de la Sociedad Civil en temáticas transversales.

    Por “transversales” entendemos aquellos conocimientos que hacen al funcionamiento eficiente de la Organización y a la competencia de sus miembros, independientemente del área temática en que la organización se desempeñe. En el caso de las capacitaciones dictadas en el marco del subprograma Capacitación a ONGs, los contenidos transversales se agrupan en cinco bloques temáticos: Liderazgo Comunitario, Pensamiento Estratégico, Evaluación de Necesidades, Planificación Participativa y Negociación. El modelo o patrón de Capacitación –tal como fue implementado exitosamente en el Municipio de Rauch en el mes de julio y agosto- comprende cuatro encuentros de tres horas reloj cada uno con frecuencia semanal, en los que se trabajan los contenidos con técnicas pedagógicas participativas. En el último encuentro, cada asistente recibe un certificado suscripto por el Docente, el Rector de la Universidad y el Intendente Municipal.

    Se contempla, además, una instancia de evaluación, que permite al equipo docente optimizar los aspectos didácticos y de contenido, y una instancia de evaluación de impacto, que mide la percepción de cambio y/o eficiencia de las prácticas organizacionales tres meses después de la capacitación. Una segunda línea del programa ConCiencia por la Comunidad –todavía no implementada- se orienta a llevar a cabo procesos de consultoría y coaching en manejo de recursos humanos, dinámica de grupos, administración, búsqueda de financiamiento y aprendizaje organizacional de las Organizaciones de la Comunidad.

    Consultoría y Coaching Organizacional es un subprograma en que el equipo de Docentes Consultores acompaña a la Comisión Directiva y participantes de las ONGs en el proceso de resolución de problemas puntuales, con el propósito de fortalecerlas y propiciar su desarrollo. Por último, el subprograma Asesoramiento a Empresas –también en etapa de elaboración- tiene como propósito orientar a las Empresas que proyectan financiar a ONGs de la comunidad acerca del impacto probable de sus programas y la calidad de su funcionamiento, y asegurar de esta manera un eficaz direccionamiento de los fondos de responsabilidad social empresaria.

    Problema o necesidad que intenta resolver:
    La premisa que orienta las acciones de este Programa es que la eficiencia de las Organizaciones de la Comunidad puede incrementarse en la medida en que sus miembros participen en procesos de apropiación de conocimientos e implementen acciones inspiradas en estos conocimientos. Desde este punto de vista, el Programa intenta resolver las necesidades de capacitación y asesoramiento de las Organizaciones de la Comunidad. El programa ConCiencia por la Comunidad, por ende, tiene como misión actualizar el potencial de eficiencia de las Organizaciones de la Sociedad Civil de la ciudad de Mar del Plata y área de influencia que trabajan con población en riesgo psicosocial, a través de la capacitación y el asesoramiento de sus miembros.

    Impacto que se logró o espera lograr en la calidad de vida de las personas excluidas:
    Los indicadores seleccionados para medir el impacto social de nuestro trabajo son: a) nº de miembros de OSC capacitados; b) evaluación cuantitativa y cualitativa de las Capacitaciones; c) grado en el que las Capacitaciones han logrado mejorar el impacto social de las OSC participantes. En la primera Capacitación del Programa, desarrollada en el Municipio de Rauch los días 21 y 28 de junio y 5 y 12 de julio de este año, se capacitaron 62 asistentes.

    El 27 % formaba parte de una ONG local o trabajaba en un emprendimiento comunitario –huerta, comedor, apoyo escolar, ropero. Las áreas temáticas de las ONGs cuyos miembros asistieron son discapacidad, medio ambiente, violencia familiar y deportes y recreación. Respecto de la situación laboral, el 77 % de los cursantes pertenecía al sector público –salud, educación, justicia, seguridad- y un 14 % se desempeñaba en el sector privado y por cuenta propia. La tasa de deserción del curso fue de 15,7 %. Al finalizar la Capacitación, se administró de manera anónima una encuesta de satisfacción de expectativas.

    El 61 % de los cursantes estuvo de acuerdo en que los conocimientos adquiridos en la Capacitación eran aplicables al trabajo cotidiano en comunidad, mientras que el 37 % pensó que eran “bastante aplicables”. Un solo participante opinó que los conocimientos impartidos eran “poco aplicables”. Para el 95 % de los asistentes, la Capacitación respondió “totalmente” y “bastante” a sus expectativas. Finalmente, el puntaje promedio sobre 10 para una escala Likert con la pregunta “Mi evaluación global de la capacitación” fue de 8,72 puntos.

    La evaluación cualitativa, que refleja el análisis de los comentarios escritos en respuesta a un ítem abierto, muestra el siguiente material: a) En primer lugar, surge el pedido explícito de continuar con las Capacitaciones. Existe la percepción de que quedaron temas sin tratar o de que faltó el tiempo para profundizarlos; b) Por otro lado, aparece la solicitud de “bajar” más el curso a las circunstancias concretas del trabajo cotidiano en comunidad, con un mayor énfasis en el trabajo grupal sobre casos prácticos; c) Por último, se recalca la necesidad de despojar todo lo posible a la Capacitación de términos técnicos, que dificultan la comprensión de los contenidos a quienes no poseen un recorrido académico.

    Respecto del grado en el que las capacitaciones han logrado mejorar el impacto social de las OSC participantes, a los tres meses de finalizada la Capacitación (mediados de octubre de 2007) se administrará una encuesta vía correo electrónico, y se implementarán entrevistas con informantes clave del Municipio de Rauch.

    Aspectos innovadores o replicables de la experiencia:
    ConCiencia por la Comunidad representa una innovación en la Extensión universitaria tradicional, ya que sitúa sus prácticas en el marco de la relación sinérgica entre Universidad, Empresa, equipo de docentes consultores, Municipio y Organizaciones de la Sociedad Civil. Tiene un alto poder de replicabilidad en diferentes municipios de la Provincia.

    Las capacitaciones de nuestro Programa son diferentes, porque:
    · Se orientan a contenidos transversales que son atractivos y aplicables, independientemente del área temática de la OSC;
    · No son aranceladas;
    · Tienen excelente nivel académico;
    · Están diseñadas especialmente para personas que trabajan en OSC;
    · Representan una propuesta dinámica, que se proyecta fuera de la Universidad y busca activamente al público objetivo en su entorno natural;
    · Se desarrollan en el marco de un Convenio de Extensión con una Universidad.

    Principales obstáculos o desafíos que presenta la práctica:
    El principal obstáculo de este Programa es la gestión de un financiamiento sustentable.

    ¿En el caso de resultar premiada la práctica postulada, en qué invertirá el premio?
    Lo invertiríamos en una computadora portátil y un cañón, que son los elementos indispensables para nuestra práctica docente.