Descubriendo el tesoro de nuestras manos

Actores involucrados en la práctica:

Alumnos, docentes, padres del Jardín de INFANTES "DR. HENOCH D. AGUIAR", Agencia Córdoba Ambiente, nutricionistas de Paicor, Escuela Superior de Gastronomía Mariano Moreno, Biblioteca del maestro, Ministerio de Educación, Dirección de Políticas Educativas: Integración con niños con necesidades educativas especiales.

Explicación de cómo y por qué nace la práctica:

"Es necesario pensar tácticas aunque sea con pocos recursos que favorezcan la transmisión de la cultura, volver a producir la multitud de opciones de la humanidad que garanticen el imaginario de un mundo mejor, de un espacio público inclusivo, un mundo donde quepan muchos mundos." Elsie Rockwell Frente a las crisis socioeconómicas sufridas en nuestro país, la escuela sigue siendo un espacio público que ubica a todos en un espacio de iguales y que se configura en muchas zonas, en el único espacio de lo público.

Por ello es necesario que se consideren, además de las propuestas ya existentes, otras que contemplen cuestiones como: -la defensa del derecho social a la educación, la comunidad con la cual se trabaja, reconociendo a los niños, adolescentes y adultos como sujetos de derechos, reencontrando tiempos y espacios institucionales que permitan abordar el análisis de las situaciones que la atraviesan, posicionándonos con fuerza y perspectiva frente a la adversidad y poder compartir nuestros proyectos con los padres, los alumnos y otras organizaciones sociales. Para estar sano y en igualdad de condiciones para acceder al mundo de la cultura, debemos estar bien alimentados. Una comida sana y equilibrada son requerimientos fundamentales para apropiarnos del saber.

Un niño con hambre o con una dieta desequilibrada, no tiene las mismas posibilidades que aquel que recibe los nutrientes necesarios para su edad. Paulatinamente, se observa un mayor porcentaje de alumnos que requieren de los servicios del Comedor brindado por PAICOR, situación ésta que preocupa por cuanto al tratarse de niños de tan corta edad, se está produciendo un corrimiento de la atención que antiguamente estaba destinada al seno familiar. En muchas familias, el horario de las comidas, es motivo de reunión, posibilidad de intercambio, de filiación, de afecto. En este momento tan particular, no sólo uno comparte el almuerzo también en ese "hacer" de los alimentos se traducen sentimientos, tradiciones, culturas, costumbres. La posibilidad de transmitir a nuestros herederos el amor y el cuidado en estos momentos familiares, como así también rescatar la valoración de la cultura del trabajo para proporcionar el sustento son alguno de los motivos fundamentales a tener en cuenta en la formulación de este proyecto.

El fin por el que nos educamos y formamos es desarrollarnos como personas críticas, adaptadas activamente a la sociedad y en condiciones de: -construir nuevos saberes y conocimientos que permitan mejorar o acrecentar los ya construidos por la cultura. -utilizar los saberes y conocimientos construidos para resolver los nuevos problemas que el medio social presenta. -convivir con los semejantes en un marco de tolerancia, de solidaridad, cuidado mutuo y respeto.

La educación es vista así como un proceso de enseñanza-aprendizaje de saberes (saber construir nuevos conocimientos, saber aprender, saber hacer, saber convivir cooperativa y democráticamente) y de conocimientos (información, conceptos, procedimientos, modos de comportamiento social). Muchas veces, las mejores intenciones se diluyen al tratar de imponer tiempos, espacios y formas de organización que son exclusivamente escolares. Explorar otras formas de organización del trabajo, así como reconocer cuáles son las condiciones de los otros (padres, alumnos, etc.) para poder incorporarlos y participar, serían el punto de partida para encontrar horizontes comunes en donde se entremezclen culturas, tradiciones y aprendizajes.

Aceptar las diferencias y el reconocimiento de la igualdad, a partir de la toma de conciencia del encuentro con el "otro" y reflexionar sobre las consecuencias que conllevan las actitudes de rechazo e indiferencia. Aproximarnos de una manera positiva a la diversidad sociocultural que presentan los miembros de la comunidad, es una actitud que requiere de aprendizajes, recordando y haciendo recordar que todos siempre tenemos algo para aprender, enseñar y compartir. La escuela así, sería vista como espacio privilegiado para trabajar la concientización de que todas y todos nacemos siendo titulares de todos los derechos, pero también para aprender a organizarnos y a acompañar las luchas para exigirlos. La florihorticultura está en condiciones de contribuir con propuestas ambiciosas al desafío que plantea la necesidad de pelear el hambre.

Actualmente, una parte significativa de la población no accede a un nivel alimentario que satisfaga dichas necesidades básicas, observándose deficiencias en el consumo de alimentos protectores como vegetales verdes, amarillos, legumbres y frutas. Con el apoyo de la Agencia Córdoba Ambiente, se presenta como alternativa la propuesta de promover la autoproducción de alimentos, a través de la realización de huertas escolares, familiares y comunitarias, para que el niño y las familias puedan acceder a una alimentación equilibrada, descubriendo lo que del trabajo de la tierra se puede obtener.

Una huerta es necesaria porque las verduras son alimentos protectores que nos ayudan a sentirnos fuertes y nos permiten tener a nuestro alcance verduras para preparar comidas ricas, variadas, sanas y nutritivas, ahorrando el dinero que se podría gastar comprándolas. Por otro lado, retomar la tarea del artesano como el hacedor desde las tradiciones culturales, resignificando su presencia, creando el espacio institucional para este aprendizaje. De esta manera, se aprenderá que con trabajo y esfuerzo e imaginación, la tierra nos da lo necesario para vivir, a la vez que podremos darnos cuenta de que trabajando juntos logramos lo que queremos y la tarea se hace más fácil ayudándonos a sobrellevar el mal momento socioeconómico que atraviesa la comunidad vecinal.

A través de esta propuesta se trata de posibilitar mejores oportunidades educativas en forma articulada, practicando el trabajo con otros, coayudándonos, a fin de incorporar conocimientos y encontrar nuevos caminos. La iniciativa de trabajar juntos, conformando una red en donde todos entreguemos esfuerzos y cosechemos éxitos.

Problema o necesidad que intenta resolver:

Bajo consumo de alimentos nutritivos. -Escasa participación de los padres en propuestas escolares. -Poca valoración de la cultura del trabajo. -Escueto aprovechamiento de los recursos humanos y naturales. Desconocimiento de los procesos de elaboración de algunos productos a partir de estos recursos, lo que produce malos hábitos alimenticios. -Desinterés y apatía.