Pileta popular

  • Desarrollo Comunitario
  • Argentina - Río Negro - El Bolsón
    Contacto: Asociación Al agua todos (Pers.Juríd.Nº 1820).
    Teléfono: (02944) 491216.
    E-mail: info@alaguatodos.org.ar.

    Actores involucrados en la práctica:
    Asociación Al agua todos (OSC, asociación sin fines de lucro); Instituto de Formación Docente Continua El Bolsón; Hospital de Área de El Bolsón (Departamento de Capacitación y Docencia; Departamento de Atención Primaria); Fundación Cooperar.
    Explicación de cómo y por qué nace la práctica:
    No existe en la región infraestructura para el aprendizaje de la natación en condiciones agradables y seguras; los natatorios privados tienen acceso restringido, la región tiene muchos lugares con agua como ríos y lagos, en los que es difícil aprender a nadar y disfrutar del agua sin correr riesgo; las condiciones climáticas de casi todo el año no permiten el ingreso al agua por períodos largos y las temperaturas de las aguas no admiten mucho tiempo de inmersión; gran cantidad de la población local no tiene desarrolladas las habilidades mínimas para desenvolverse en el agua en caso de accidentes, la vivencia de disfrutar del agua está reservada a grupos con determinadas condiciones socioeconómicas, lo que replica mecanismos y modelos de exclusión que se pretenden revertir a través de una propuesta participativa, en torno al derecho de aprender y disfrutar del agua y acceder a ella sin barreras, en igualdad de oportunidades.

    Un grupo de personas que tuvieron en su infancia o juventud la posibilidad de acceder al juego y aprendizaje de la natación, se organiza en torno a una donación particular para dar forma a un proyecto que permite a todos tener en la localidad un lugar adecuado para vivir esa experiencia, dentro de una propuesta participativa y solidaria, con especial énfasis en la integración social como objetivo común.

    La Asociación Al agua Todos recibió una donación particular con la que construyó una pileta climatizada y cubierta, de dimensiones inéditas en la región (25 m x 8, 5 m; con profundidades que oscilan entre 0,75 m a 2,10 m), y elaboró un proyecto en el cual se promueve la integración social a partir de una experiencia saludable, como es la oportunidad de disfrutar del agua y aprender con otros a desenvolverse en el medio acuático.

    La inclusión se promueve a partir de crear un espacio comunitario en el que se valoran y respetan las necesidades e intereses en la diversidad, creando las condiciones para que las desigualdades generadas por el modelo socioeconómico vigente sean mitigadas a partir de programas participativos, comprometiendo al conjunto de la población beneficiaria en la generación de propuestas integradoras. El compromiso trasciende la oportunidad de acceder a la pileta, propiciando a través de campañas de promoción de la salud la valoración de la salud individual y social y la necesidad de evitar la exclusión en el ejercicio de los derechos de las personas: apoyo escolar, detección y tratamiento de afecciones que limitan o restringen el acceso a prácticas saludables, espacios para la recreación y el disfrute del tiempo libre, la organización, la reflexión y el análisis de la realidad, para poder desarrollar mecanismos de transformación social desde la propia comunidad.

    Problema o necesidad que intenta resolver:
    El problema que se intenta resolver es la falta de un espacio comunitario accesible para el desarrollo del aprendizaje de la natación, y, desde una perspectiva más amplia, falta de organizaciones comunitarias que propongan, desde la participación y el compromiso, alternativas para transformar la realidad y mejorar la calidad de vida de la población.

    Impacto que se logró o espera lograr en la calidad de vida de las personas excluidas:
    Se espera convocar a amplios sectores de la comunidad a participar en las propuestas de la pileta, porque se conoce que la experiencia en el medio acuático es de un enorme potencial motivador para todas las edades y sectores sociales. En diferentes experiencias relacionadas con la actividad en el agua, se verificaron saludables cambios de hábito propicios para la prevención de enfermedades: higiene, detección precoz de afecciones (atendidas a tiempo gracias a ello), atención de la salud individual y compromiso con la salud comunitaria.

    La motivación de poder acceder a la pileta, cambió la actitud de niños y jóvenes frente a la asistencia a los centros de salud, a dejarse revisar y atender su cuerpo. Atenderse, cuidarse, estar bien forman parte de la construcción de la autoestima y el reconocimiento del cuerpo sano como un derecho al que todos debemos acceder.

    Hombres y mujeres de todas las edades y de cualquier condición socioeconómica, tienen la oportunidad de acercarse al aprendizaje de la natación y al juego en el agua. Es una actividad que admite la participación de todos, es incluyente por sí: el medio acuático, iguala en su propuesta de movilidad y sostén del cuerpo. Aún con movilidad reducida, con dificultades motoras o neurológicas, todos pueden disfrutar del placer de desenvolverse en el agua, y es innegable la acción terapéutica que estas actividades tienen.

    Las personas, valoradas en su calidad como tales, sin diferenciarlas sino convocándolas desde su particularidad, se integran a las propuestas con entusiasmo y responsabilidad. La diversidad, aceptada y respetada, se constituye en una característica enriquecedora de la experiencia compartida, y lo que era vivido como elemento discriminatorio, se transforma en atributo personal, atendido, considerado, asumido comunitariamente.

    En los servicios generales de la pileta, se prevé una población beneficiaria de 1900-2000 personas de todas las edades (por mes). Para la franja horaria en la que se trabajará con población infantil escolarizada, se prevé la atención de 2000 a 2400 niños por año.

    Aspectos innovadores o replicables de la experiencia:
    Generar instancias de gestión interinstitucional con organismos oficiales, apelando a sus objetivos de bienestar social y optimizando los recursos existentes. Revalorizar los recursos humanos de las instituciones y promover la creatividad para el desarrollo de planes conjuntos. Comprometer a la sociedad civil en el ejercicio de sus derechos, priorizando los sectores excluidos de hecho, para la promoción social y la verdadera integración, mitigando las secuelas de la exclusión con programas de participación solidaria y responsable. Poner al servicio de toda la comunidad una infraestructura pensada y construida para el uso de todos, con el respaldo de una organización comunitaria que desde su estructura administrativa y técnica, resguarda los bienes e intereses compartidos por quienes se acercan a ella.

    Se trabajó comunitariamente convocando a las instituciones y organizaciones de base, obteniendo excelentes respuestas de estímulo y entusiasmo por la iniciativa. Se realizaron convenios con instituciones oficiales y se obtuvo el aval de organizaciones de variada índole. El Concejo Deliberante de El Bolsón, y la Legislatura de Río Negro declararon de interés la propuesta. El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación otorgó un subsidio a la organización para la restauración de un edificio histórico emplazado en el predio donde se construyó la pileta, que actualmente es la sede de la organización y de la administración de la pileta. Allí se están dando clases de apoyo escolar por un convenio con el Instituto de Formación Docente continua de El Bolsón, a cargo de estudiantes y profesoras del “Taller de Investigación de la práctica docente 1”. La Universidad del Comahue está organizando una capacitación sobre el derecho a aprender y jugar en el agua, dentro de su programa de extensión.

    Un grupo de docentes, guardavidas e instructores de natación se reúne quincenalmente para dar forma al cronograma de horarios y ofertas de servicios, fichas de inscripción y revisión médica. Se cuenta con el asesoramiento de un profesor de la Universidad de la Patagonia, San Juan Bosco, para el diseño y proyección de los aspectos económico-administrativos del proyecto en funcionamiento.

    Se desarrollaron campañas de apoyo de la comunidad, equipando con sillas el SUM de la sede y promoviendo jornadas de trabajo para limpieza del predio, preparación de la pileta para la pintura, y un concurso de dibujo infantil, del que se seleccionaron 6 imágenes para la impresión de tarjetas de saludo, para facilitar el aporte de todos los sectores de la comunidad y dar a conocer el proyecto.

    Principales obstáculos o desafíos que presenta la práctica:
    La falta de experiencia en el ejercicio de los mecanismos democráticos para la toma de decisiones, del compromiso y responsabilidad social frente a nuestra realidad. El modelo hegemónico socioeconómico, que enfatiza la exclusión. El desarrollo masivo de estrategias y prácticas asistencialistas, devastadoras de la dignidad, desmovilizadoras de procesos sociales transformadores, y además, insuficientes para abastecer las necesidades de enormes sectores de la sociedad, profundizando la brecha entre ricos y pobres en cuanto al acceso a los bienes sociales y al ejercicio de los derechos humanos.

    ¿En el caso de resultar premiada la práctica postulada, en qué invertirá el premio?
    Consideramos muy importante contar con un mobiliario cómodo y adecuado a las necesidades de la actividad principal del proyecto, por lo que emplearíamos el dinero del premio en equipar los vestuarios de mujeres y hombres, para que puedan cambiarse y prepararse para ir al agua con comodidad y seguridad para sus pertenencias personales. Entendemos que los momentos previos y posteriores al ingreso al agua son espacios de formación, de consolidación de hábitos, de respeto y cuidado por la intimidad, por los diferentes ritmos e inhibiciones personales, oportunidades para aprender a compartir, a ser solidario, a convivir. Necesitamos estanterías, bancos largos, lugares para depósito de las pertenencias de los usuarios (estanterías abiertas y lockers), mostrador para el sector de la recepción.