Unidades Municipales Integradas ( U.M.I.)

  • Desarrollo Comunitario
  • Argentina - Gran Buenos Aires
    Contacto: Prof. Laura Esther Funes (Secretaria de Promoción e Inclusión Social).
    Teléfono: 02227 15557305, Dirección: Ramón Melgar 1947 - Marcos Paz.
    E-mail: laurafunes@municipiomarcospaz.gov.ar.

    Actores involucrados en la práctica:
    Municipio de Marcos Paz, vecinos del Barrio, organizaciones de la comunidad (capillas, comedores, merenderos, clubes, etc.).
    Explicación de cómo y por qué nace la práctica:
    Las profundas crisis económicas que atraviesan aún a nuestro país golpearon también duro a Marcos Paz. Muchos padres de familia perdieron su empleo, mientras que otros muchos hermanos golpeados por la pobreza y el desarraigo llegaron desde municipios del conurbano, provincias del interior o países limítrofes. Desde la Secretaría de Promoción Social, tenemos como objetivo que las familias, con sus fortalezas, a pesar de su situación de debilidad socio-económica, encuentren el camino para la inclusión social.

    Según la estadística que pudimos ir elaborando desde el 2003, en Marcos Paz 9000 familias se encuentran bajo la línea de pobreza; la mitad de éstas son indigentes.

    Con este lineamiento general, fuimos cambiando el eje de las políticas sociales del municipio. Como primer paso, se incorporaron Trabajadores Sociales a la Secretaría, para que desde su profesionalidad y compromiso, visitaran los hogares de las personas con necesidades y acordaran con esas mismas familias la forma de superar esa situación, teniendo en cuenta el bagaje cultural y afectivo de nuestros vecinos, sin "dar" desde el Estado, sino construyendo juntos alternativas de crecimiento.

    Comenzaron a desarrollarse varios programas: nacionales, provinciales y municipales.

    En ese proceso fueron construyéndose, con los vecinos, las UMIS (Unidades Municipales Integradas). Son espacios de participación vecinal, con servicio social descentralizado (una vez por semana asiste el trabajador social de esa zona) que se ubican en determinados barrios populosos, con un radio de influencia de dos o tres barrios más. Las UMIS fueron organizadas con los vecinos a partir de mediados de 2004. Existen hoy 9 UMIS en funcionamiento y está previsto abrir otras 4. Junto con la orientación y acompañamiento del municipio, los vecinos fueron abriendo en ellas bibliotecas, merenderos, cursos a cargo de vecinos que tienen un oficio y lo pueden enseñar: apoyo escolar, folklore, artes plásticas, clases de gimnasia aeróbica, de música, de ajedrez, carpintería, peluquería, huerta comunitaria, etc.

    Cada UMI fue convirtiéndose en un importante centro de participación vecinal, donde los actores involucrados se reúnen para discutir, por ejemplo, cómo se encuentra el barrio y qué puede llegar a cambiarse. Es decir, diagramar entre todos un diagnóstico participativo, del que surgieron acciones concretas que el municipio acompañó, como la vacunación de los perros de un barrio o la disposición de cestos de basura en otro. También, las UMIS fueron conformándose como centros culturales barriales.

    Periódicamente va hasta cada una de ellas el cine móvil para los chicos; se organizaron las bibliotecas, armadas con donaciones de los vecinos; hay funciones de teatro infantil y también desde estos centros se organizaron viajes con los chicos del barrio, muchos de los cuales, muy humildes, conocieron Capital Federal y el mar, en un inolvidable viaje al complejo de Chapadmalal.

    Problema o necesidad que intenta resolver:
    En primer lugar, la centralización de los servicios municipales en el Palacio Municipal, ubicado en el ejido urbano, distante de los barrios.

    Además, estos vecinos pudieron acceder a la cultura, el deporte, la formación profesional, la organización comunitaria.

    Impacto que se logró o espera lograr en la calidad de vida de las personas excluidas:
    Desde la apertura de las UMIS, los vecinos participaron directamente en la resolución de sus problemas. Algunos desempleados se reencontraron con su profesión a través de la enseñanza o del ejercicio de la misma, lo que los arrancó de la depresión que provoca la inactividad y la exclusión social.

    Los más chicos encontraron, cerca de su hogar, acompañamiento en la resolución de las tareas escolares, espacio de esparcimiento, donde desarrollar un deporte, ejercer su derecho al juego y sobre todo, mucho afecto.

    Aspectos innovadores o replicables de la experiencia:
    Lo que consideramos innovador es el hecho de que, si bien el municipio se descentraliza a los barrios, que son los mismos vecinos quienes le dan su impronta a la organización del desarrollo de las actividades de cada UMI.

    Año a año hemos incrementado la cantidad de deseos cumplidos a niños en estas condiciones. Las expectativas siguen fundadas en este crecimiento que apostamos aumentar en los próximos años para que el sueño de un niño enfermo no espere más de 24 horas en hacerse realidad.

    Principales obstáculos o desafíos que presenta la práctica:
    Los tiempos de la gente no son siempre tan rápidos como nos gustaría. Se trata de revertir hábitos enquistados en la comunidad a través de la práctica de la socio-educación y de la participación vecinal. Creemos que es el único camino para la inclusión social.

    ¿En el caso de resultar premiada la práctica postulada, en qué invertirá el premio?
    En mejorar la infraestructura, mobiliario e insumos de las UMIS. Es nuestro mayor deseo dotar de computadoras a las UMIS, ya que en este Siglo XXI inclusión social también es derecho a acceder a la tecnología.